La redes sociales pueden encumbrar a un candidato rezagado en express, lo aprendimos con Barack Obama cuya candidatura se antojaba vulnerable; un ejercicio estudiantil frente a la chica más popular, en este caso se trataba de la tres veces engañada y perfectamente posicionada para ocupar el puesto más importante del país más poderoso del planeta, y entonces ¿Qué demonios pasó? Se preguntaría la Clinton:
R: Menospreciaron el desarrollo de las redes sociales, quienes habían adoptado al Hawaiano Afroamericano Obama como su candidato.
Quienes también podrían dar testimonio (bueno ya no) de la influencia de un twitt o un comentario en el face son Gadaffi y Mubarak, seguro que jamás imaginaron que aquellos #TT construirían el sepulcro de sus mandatos.
Sin duda lo que realmente preocupa a los mexicanos es la neta mediática de que Enrique Peña Nieto es el presidente de facto, que nada ni nadie puede derrocarlo, lo dicen en Televisa, lo repiten en Azteca y Milenio, “las encuestas tienen un nivel de confianza del 97%”, Javier Alatorre o López Dóriga siempre sonrientes aseguran (de hecho cantan la victoria): “Si hoy fueran las elecciones Enrique Peña Nieto sería el Presidente de México con 52% de los votos” y claro quién es Loret de Mola para desmentirlos?, en ese cártel por-priísta es tiempo de festejar!

En Twitter se han celebrado auténticos festines con la vacilante imagen del Divo de Atlacomulco, expuesto tras su falsa popularidad, pues miles de sus incontables seguidores son cuentas falsas, creadas ex profeso para que al igual que las encuestas por prepago allanen el camino plagado de disidentes.
Ayer el #TT de EPNTienemásseguidoresfalsosque nos presentó geniales tuitts que reflejan la inconformidad y desmienten lo dicho por los medios contratados para su campaña.
Por México usemos las redes sociales con responsabilidad y compromiso, construyamos un futuro distinto al que por 70 años en la presidencia y 80 en algunos estados ha escrito el PRI y secuaces con saqueos, complicidades, crímenes, persecuciones y sangre.
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